Hola emancipaditos!
Ya estoy aquí de nuevo tras una larga pausa. Me vais a tener que perdonar por tanto tiempo de ausencia, pero estaba haciendo cosas propias de emancipados, como viajar, salir o gorronear. En este tiempo mi vida se volvió más activa y surgen situaciones en las que no estemos preparados y nos sacudan un "¡po' toma!" en toda la frente. Con la idea de salvaros la vida y de quedar en ridículo os presento uno de los briconsejos más útiles de esta temporada: el capote.
¿Cómo afrontaríais una violación de vuestro orgullo? ¿cómo salir de situaciones límites? ¿cómo evitar que los huevos se te suban hasta la campanilla? ¡Aprende a usar el capote, chaval!
Esto es muy fácil. El objetivo es retomar el control de algo que se te ha ido de las manos. Para ellos hay que usar eso podrido que está debajo de tu pelo....sí, se llama cerebro y sirve para algo. Es más, se ha descubierto hace poco... ¡¡¡que hay gente que piensa!! Dentro de esa pequeña cosa de aspecto repugnante hay una parte dedicada a la picardia y a la improvisación. ¡Emancipados, tenemos que estar más atentos, ostias!


Que el policía te pilla conduciendo con un cubata en la mano; "señor agente, se lo estaba aguantando a mi amigo, que va aún más borracho que yo". Que tu novia quiere ir de viaje contigo y tus amigos; "mira lo siento, me encantaría que vinieras, pero te vas a aburrir mucho, y vamos a estar todo el día jugando al pro" (espera que no le guste el fútbol). Que un amigo quiere salir contigo pero tú no tienes ganas porque es un pesado pero quieres salir con otro y te pilla en la calle, "¡qué suerte que te he encontrado! Te he estado llamando y no había manera de contactar contigo". El capote no sólo es una excusa barata y poco creíble, incapaz de engañar al más tonto, no. El capote sirve para que tú te creas esa excusa y se la vendas como la aunténtica verdad de Cristo a esa persona..
El capote también es muy útil para salir de situaciones embarazosas, como que tu madre te pille con una chica en la cama "las sábanas las vas a limpiar tú con tus huevos"; o peor, ¡con un chico! O que tu compañero de piso entre en tu cuarto cuando está sonando la 5º sinfonía de la flauta de un solo agujero. ¡Zas, en toda la boca!  ¿Cómo pedirle a tu amigo que te invite cuando él sabe mejor que tú, que nunca le vas a pagar? "no me fío ni de mi padre".

La vida está llena de trabas, de gente molesta, incómoda que hay que saber evitar. Lleva siempre el capote encima y hallarás la verdadera felicidad, palabra de emancipado.